De acuerdo con una comunicación del Ministerio de Relaciones Exteriores, el gobierno saluda el pacto, al cual califica “un paso muy importante hacia la formación de un gobierno civil que lleve a la nación a elecciones nacionales libres y justas”.
Las autoridades etíopes apoyan su implementación y tienen confianza en la sabiduría de los actores políticos y militares para llevar a Sudán a una transición democrática que satisfaga las aspiraciones del pueblo, añade el texto.
En Jartum, capital sudanesa, la junta militar y más de 40 organizaciones civiles firmaron la víspera el Acuerdo, aunque la situación en el estado varió poco, debido a que otros grupos lo condenaron e instaron a realizar marchas de protesta.
Entre otras disposiciones, el documento establece la formación de autoridades civiles en todos los niveles, y declara que Sudán es un estado cívico, democrático, federal y parlamentario, donde la soberanía corresponde al pueblo, fuente de los poderes.
También decreta que la nación tendrá un Consejo de Seguridad y Defensa encabezado por el primer ministro, y un ejército profesional comprometido con el deber de proteger la seguridad fronteriza y del gobierno civil democrático.
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