Según un portavoz del Ejecutivo, los tres individuos, arrestados el viernes último serán juzgados bajo los cargos de “conspiración para cometer un delito grave y encubrimiento de traición”, difundió el portal digital Africa News.
Poco después de que el pasado 21 de diciembre, el Gobierno informara que las fuerzas de seguridad frustraron un intento de asonada, las autoridades detuvieron a siete militares, entre ellos un capitán y un teniente, por supuestos vínculos con el proyectado acto fallido.
Según el asesor de seguridad nacional Abubakar Suleiman, los complotados tenían entre sus objetivos detener a integrantes del Gabinete y otros funcionarios para emplearlos como rehenes y, según ellos, evitar una supuesta intervención extranjera en este territorio.
Ante la gravedad de la situación, recientemente el gobierno de este país africano creó un grupo investigador, compuesto por funcionarios de organismos como el Ministerio de Justicia y la Oficina de Seguridad Nacional, que deberán presentar un informe en el plazo de un mes.
En Gambia, gobierna el presidente Adama Barrow, quien accedió al poder el 19 de enero de 2017, tras vencer en elecciones al anterior mandatario Yahya Jammeh (1996-2017).
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