El documento fue rubricado por el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg; el jefe del Consejo Europeo, Charles Michel; y la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen
La llamada Declaración Conjunta, la tercera que se aprueba por ambas partes, está dirigida fundamentalmente al reforzamiento de su colaboración en materia militar, según las declaraciones de sus máximos representantes, y específicamente a la ayuda bélica a Ucrania.
El secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, en una conferencia de prensa, luego de la ceremonia de firma, en la sede de la alianza militar en esta capital, calificó el acuerdo como muy importante y destacó el papel crucial de la OTAN en la seguridad euro-atlántica.
Por su parte, la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, amenazó con nuevas sanciones a los países que colaboren con Rusia, especialmente a Belarús e Irán, y confirmó el apoyo transatlántico hacia Ucrania y dijo que continuará fortaleciéndose en 2023.
El jefe de Estado belaruso, Alexandr Lukashenko, declaró en varias ocasiones que su país no participa en el conflicto en Ucrania.
De la misma forma, el Gobierno iraní ha desmentido las afirmaciones de líderes occidentales sobre una supuesta entrega de armas a Moscú, especialmente naves aéreas no tripuladas.
En tanto, Rusia envió notas de protesta a todos los países que suministran armas a Ucrania y su gobierno reiteró recientemente que los intentos de saturar a Ucrania de armamento no favorecen el avance de las negociaciones y no ayudan a un clima propicio para alcanzar la paz.
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