El Ejecutivo de la República Bolivariana expresó en un comunicado que el pronunciamiento de Londres constituye una “flagrante injerencia” en los asuntos de exclusiva competencia del Estado venezolano.
Esto, dijo, con el objetivo de afectar los verdaderos espacios de diálogo convocados por el presidente Nicolás Maduro, así como los logros concretos que fueron acordados para la protección del pueblo y la restitución del patrimonio nacional.
El Gobierno bolivariano conminó a su homólogo del Reino Unido a procurar un papel constructivo y establecer con Venezuela caminos de entendimiento que permitan superar los escollos de la relación bilateral y mencionó en ese sentido la apropiación indebida del oro perteneciente al pueblo venezolano.
La República Bolivariana no desistirá en la defensa de su soberanía y del Derecho Internacional, concluyó la nota.
Este jueves, Maduro demandó que nadie debe meterse en los asuntos internos de Venezuela y se refirió al comunicado emitido por Londres que, como en los viejos imperios, sacaban edictos reales, donde solo reconoce a la Asamblea Nacional de 2015 como parlamento legítimo.
Resulta risible, ridículo, que a estas alturas se presten a la farsa, expresó, y remarcó que quien legisla, designa los poderes y aprueba los presupuestos de manera determinante es la Asamblea Nacional electa por el pueblo en 2020 e instalada el 5 de enero de 2021.
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