“Nuestro querido Robert nunca dejó de sorprendernos, su determinación era inquebrantable, no abandonó ninguna lucha, siempre entregado al trabajo, nada podía apagar su voluntad, así como nada podrá apagar su ejemplo en el corazón valiente de nuestra juventud”, escribió el mandatario en su cuenta en Twitter.
En un audiovisual que acompaña el mensaje, el jefe de Estado subrayó que Serra era uno de los más destacados líderes políticos, revolucionarios, de la generación de oro, que se formó en el discurso del pensamiento, en la moral, en el ejemplo y en el sueño libertario de nuestro comandante Hugo Chávez.
El 1 de octubre de 2014 un grupo de hombres armados asaltó la vivienda del líder socialista y pusieron fin a su vida con tan solo 27 años y a la de su esposa María Herrera, un crimen que se presume fue financiado por el exmandatario colombiano Álvaro Uribe y cuyo autor material resultó Leiver Padilla, alias El Colombia.
La muerte de Serra recibió la condena del Gobierno y la sociedad venezolana, al tratarse del más joven diputado en la historia de la Asamblea Nacional (22 años) y de ser una figura destacada y en ascenso dentro del Partido Socialista Unido de Venezuela.
Su asesinato ocurrió en medio de un contexto violento en la sociedad venezolana, inducido por sectores de la extrema derecha nacional y estimulado por Estados Unidos y el entonces Gobierno colombiano, que tuvo como fin derrocar al presidente Nicolás Maduro.
La espiral de violencia de las llamadas guarimbas en los sucesos de 2014 dejó un saldo 43 muertos y 800 heridos, según los datos oficiales.
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