El 19 de enero de 1881, hace exactamente 142 años, el Apóstol cubano desembarcó por Puerto Cabello, estado de Carabobo, en el centro norte del país, y al día siguiente, en la noche, embarcó y al amanecer del 21, llegó al Puerto de La Guaira.
Con la pasión de los que aman en la profundidad de pensamiento y acción al héroe, el asesor de la Casa de Nuestra América José Martí en esta capital, Rubén Rodríguez, reveló a Prensa Latina ese hecho histórico, a propósito de la jornada por el 170 aniversario del natalicio del político, el 28 de enero de 1853.
Esa Casa la fundaron los comandantes Hugo Chávez (1954-2013) y Fidel Castro (1926-2016), comentó el también profesor, quien asegura que el poeta cubano cumplió con creces la frase: “Deme Venezuela en qué servirla: ella tiene en mí a un hijo”.
Rememoró que cuando embarca por Puerto Cabello, Cesta de Flores, como la llamó él en su texto Un viaje a Venezuela, allí se reunió durante seis horas con los masones de esa ciudad y fueron ellos los que le dieron la bienvenida.
Rodríguez aclaró que habitualmente se menciona el viernes 21 de enero de 1881 al filo de las 18:00, hora local, su arribó a este país, pero en esa fecha es cuando llega a la Plaza Bolívar, de Caracas.
Siempre apelamos a la épica de la estancia de Martí frente a la estatua de El Libertador entre aquellos árboles altos y olorosos de la Plaza, pero hay que buscar otras condicionantes, comentó al referirse a las circunstancias históricas en que tocó tierra venezolana.
Hay que tener en cuenta que se terminó la Guerra de los Diez Años con todo el desaliento y el desconcierto de no haber alcanzado la paz, la libertad e independencia que soñaron los próceres, apuntó.
El también presidente de la Fundación Sociedad Cultural José Martí aquí, recordó que como otros combatientes cubanos (Máximo Gómez y Antonio Maceo), él emigró a otras zonas de la América, buscando donde ubicarse y ganar el sustento familiar.
Venezuela, expresó, era una buena opción y tenía el antecedente y vocación de “venir a buscar a Simón Bolívar”, además este país fue fundamental en la formación del pensamiento militar del Mayor General José Martí, apostilló.
El profesor universitario añadió que la nación bolivariana había liderado el movimiento independentista nuestroamericano, y estaba en la construcción de la nueva sociedad, “con defectos y con virtudes, con Antonio Guzmán Blanco al frente, pero lo estaba haciendo”, acotó.
Puntualizó que también este país fue durante la Guerra de los Diez Años uno de los más grandes apoyos que tuvieron las armas cubanas, con la expedición venezolana de vanguardia, bolivariana y con los clubes que aquí se fundaron.
Rodríguez aseguró que Martí no venía a tierra estéril, él venía a una que dio mucho apoyo, tanto su pueblo como su gobernante en aquel momento, pero era una “tierra de promisión donde un emigrado, un desterrado, con ideas revolucionarias, tenía caldo de cultivo para ubicar su familia”.
Cuando él parte de Venezuela el 28 de julio de 1881, expulsado por Blanco, ya había aportado, porque era Martí un personaje literario, político y revolucionario que molestaba al régimen.
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