Durante el primer ciclo de trabajos de la Mesa de Diálogos de Paz ,celebrado del 12 de noviembre al 21 de diciembre en Caracas, Venezuela, las partes convinieron implementar un sistema de alivios humanitarios para garantizar el retorno de población desplazada y poner fin a situaciones de confinamiento generados por condiciones de violencia en las regiones citadas.
Para conocer de la propia comunidad sus problemáticas las partes propusieron realizar la Caravana en esos territorios.
La guerrilla recordó en un artículo publicado en su web ELN-Voces que esas zonas están habitadas por pueblos indígenas y afrodescendientes, víctimas del peor genocidio de la historia durante la conquista de África y América.
Desde esos lugares la población fue desplazada y la obligaron a vivir en regiones apartadas como el Bajo Calima, Valle, y el Medio San Juan, Chocó, donde el Estado colombiano solo ha llegado con sus fuerzas militares y narcoparamilitares.
En esas áreas la exclusión no se detiene, los megaproyectos, la depredación del ambiente y la necesidad extractiva, convierten a estos territorios en importantes, por ello, continúa su despojo a las comunidades y hacen inviable su vida allí, remarcó.
«En este marco, la Mesa de Diálogos entre el Gobierno Nacional y el ELN, pactó un Acuerdo parcial para lograr que los pueblos desplazados puedan retornar a sus territorios, bajo tres principios: seguridad, voluntariedad y dignidad», puntualizó.
El primer paso fue la realización de una Caravana Humanitaria para verificar las condiciones que sufren las comunidades y recoger propuestas de cómo puede ser el retorno y escuchar las exigencias de los pueblos, detalló.
Esta se llevó a cabo entre el 17 y el 22 de enero, primero llegó a Cali para conocer las propuestas de las personas que allí se encuentran desplazadas, luego pasó a Dagua donde hay familias del pueblo Wounan que salieron de sus Resguardos hace más de un año.
Visitaron albergues de población desplazada en Buenaventura y una vez conocidas las realidades de las personas desplazadas, la Caravana partió hacia el territorio.
Participaron más de 150 personas como organizaciones sociales, comunidad internacional, instituciones de Buenaventura y el Valle del Cauca, delegados de la vicepresidencia, medios de comunicación, equipos del Gobierno y de la Gestoría de paz del ELN.
«Las comunidades manifiestan que esta es una gran oportunidad para ser tenidas en cuenta y que la paz la construyamos todos, pero debe haber un compromiso con ellos que les permita vivir dignamente, que sean respetadas sus tradiciones y la vida digna que merecen», señaló el ELN.
Anunció que este tema lo abordarán en el Segundo Ciclo de la Mesa de Diálogos a realizarse en México para buscar medida para el regreso a las comunidades.
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