Según un comunicado compartido este lunes, el grupo sindical instó a dar marcha atrás en los planes de recortes de miles de puestos de trabajo en desarrollo en Alemania y el desvío de capacidad hacia Estados Unidos.
Además, rechazó la estrategia anunciada de una «reducción masiva adicional» de funciones administrativas en ese país europeo durante los próximos años.
Advirtió que, de concretarse estos planes, las medidas implementadas afectarán la producción de la compañía norteamericana no solo en ese país, sino en toda Europa.
«Si las negociaciones entre el comité de empresa y la dirección en las próximas semanas no garantizan el futuro de los trabajadores, nos uniremos al proceso», dijo IG Metall.
Previamente, la vicepresidenta del comité de empresa de las plantas alemanas de Ford, Katharina von Hebel, dijo a la prensa que prevén cerrar hasta tres mil 200 puestos de trabajo en la planta de Colonia, que cuenta en la actualidad con 14 mil empleados.
Además, en una reunión separada entre la dirección y los representantes de los trabajadores, Ford dijo que planea una reducción del 65 por ciento en puestos de desarrollo y cerca del 20 por ciento en puestos administrativos en Europa, según IG Metall.
La empresa norteamericana prefirió no dar declaraciones y se remitió a un comunicado anterior, según el cual la transición a la producción de vehículos eléctricos requerirá cambios estructurales, “pero no harán comentarios hasta que los planes sean definitivos”.
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