La Confederación de Fútbol de la Asociación del Norte, Centroamérica y el Caribe (Concacaf) avaló la presencia de los equipos nacionales del país sede en ambos sexos pese a no clasificar a este certamen, algo que directivos y observadores estiman pudiera considerarse un premio al país y al deporte que es pasión nacional.
El Salvador asumió la organización de la cita regional con un tiempo estimado de 18 meses cuando por regla los países tienen seis años para organizar este tipo de certámenes.
Recientemente, el dominicano Luis Mejía, presidente de la Organización Deportiva Centroamericana y del Caribe (Odecabe) dijo que el país fue la tabla de salvación de la competencia regional más antigua del mundo.
«Después de haber llevado un debido proceso de conciliación e información sobre los métodos de clasificación para los Juegos Centroamericanos y del Caribe 2023 y considerando que este es un torneo de desarrollo que no clasifica a ninguna competencia, Concacaf informa que aprobará de manera excepcional la participación de El Salvador en ambas categorías», dijo un comunicado.
El ente regional dio el permiso a El Salvador de tener representación en los juegos en su calidad de anfitriones, pese a que no estaba contemplada, en un principio, la clasificación automática de la nación que albergara este certamen.
Concacaf, una de las seis Confederaciones continentales que integran la FIFA, que asiste a 41 Asociaciones miembro, desde Canadá en el norte hasta Guyana, Surinam y la Guayana Francesa en el sur, estimó además que la inclusión del país sede “no afecta la integridad de la competencia o a los países previamente clasificados».
jha/lb
