Según la nota de la Cancillería, divulgada este domingo por la agencia de noticias Sputnik, Tokio culpa a Rusia de todos los problemas imaginables, sin embargo pasa por alto la ilegalidad y la hostilidad de sus propias acciones, a la par que no oculta que sus pasos se encaminan a desestabilizar la situación política en la nación eslava.
El ente constató que las «relaciones ruso-japonesas empezaron a degradar fulminantemente tras el comienzo de la operación militar especial en Ucrania», pues la administración del primer ministro Fumio Kishida, violando todas las normas adoptó medidas inamistosas contra Rusia.
Además impuso 15 paquetes de sanciones personales y sectoriales, dejó de aplicar la cláusula de nación más favorecida y expulsó a un grupo de diplomáticos rusos, destacó el comunicado de Ministerio de Asuntos Exteriores.
Para volver a un diálogo normal, los vecinos japoneses deben mostrar un respeto elemental hacia Rusia y deseos de mejorar las relaciones bilaterales, señaló al agregar que «por el momento, Tokio no muestra tales deseos».
El pasado viernes el gobierno de Japón anunció la prohibición de exportar a Rusia «artículos de doble uso que puedan contribuir al desarrollo de la capacidad militar y otros», entre ellos vacunas, equipos médicos y material radiactivo.
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