El Ministerio de Relaciones Exteriores aclaró que se trata de un aparato de factura nacional, civil y usado para desarrollar estudios meteorológicos.
Según explicó, el equipo se desvió del curso programado debido a la fuerza de los vientos del oeste y su capacidad limitada para autodirigirse.
La parte china –añadió- lamenta la entrada sin intención del dispositivo al espacio aéreo de Estados Unidos por un motivo de fuerza mayor y seguirá comunicándose con (la parte) norteamericana para manejar apropiadamente esta situación inesperada. Más temprano una vocera de la Cancillería adelantó que el gigante asiático estaba por verificar los reportes acerca de un supuesto globo-espía del país sobrevolando Estados Unidos, tras reiterar su respeto a la soberanía de otras naciones.
Urgió calma y mucho cuidado, tras pedir a los políticos y al público abstenerse de sacar conclusiones hasta tener un entendimiento bien claro de los hechos.
No obstante, ratificó que China es un país responsable, siempre cumplió con las leyes internacionales y no tiene intención de violar el territorio ni el espacio aéreo de ningún estado soberano.
Un oficial del Pentágono informó sobre la presencia de un globo chino de gran altitud sobre “sitios sensibles para recolectar información” como Montana, donde radica una importante base nuclear.
Confirmó que monitorean el aparato, que se ubica por encima del tráfico aéreo comercial y, de momento, no representa peligro para el sector militar ni civil en tierra.
También indicó que decidieron no dispararle por temor a causar lesiones a la población, pero notificaron al respecto al presidente estadounidense, Joe Biden.
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