Bajo la óptica de asociación estratégica en múltiples ámbitos, el dignatario y su homólogo João Lourenço presenciaron ayer la firma en Luanda de cuatro instrumentos jurídicos en el campo de las finanzas y las telecomunicaciones.
El acuerdo de financiamiento entre la República de Angola y la Agencia Francesa de Desarrollo (AFD) fue suscrito por el canciller Téte António y el director general de la entidad gala, Rémy Rioux.
Mientras el referido a la Facilitación del Crédito llevó la firma del representante de la AFD y la ministra angoleña de Finanzas, Vera Daves.
Los otros dos documentos consistieron en el contrato y su respectiva adenda para el diseño, la fabricación y el suministro de un Sistema Satelital de Observación de la Tierra, rubricados por el titular de Telecomunicaciones, Tecnologías de la Información y Comunicación Social, Mário Oliveira; y el presidente de la empresa Airbus Defence and Space SAS, Jean-Marc Nasr.
Al decir de Macron, Francia tiene el propósito de fortalecer la cooperación con Angola y otros estados africanos para el fomento de la agricultura, lo cual incluye herramientas financieras de apoyo a las micro, pequeñas y medianas empresas.
Entre las esferas prioritarias, ambas partes distinguieron también los sectores de energía, pesca, industria agroalimentaria, turismo, logística, producción de medicamentos para uso humano y animal, equipamiento ferroviario y construcción civil.
Asimismo, se pronunciaron a favor de ampliar la cooperación en materia de educación básica y enseñanza superior, lo que contemplará la formación de personal para el manejo del futuro satélite de observación de la Tierra, denominado Angeo-1.
Según afirmó Lourenço, Francia tiene en Angola a un aliado en África que va a cooperar en todos los dominios, incluidas las cuestiones de la paz y seguridad, “no solo en nuestro continente, sino también en el resto del mundo”, aseveró.
Para el Gobierno galo se trata de forjar vínculos de nuevo tipo con el continente, “basados en la humildad” y conscientes de los desafíos en esta región del planeta, alegó Macron el pasado 27 de febrero en París antes de iniciar la gira por varios países del área, a saber, Gabón, Angola, República del Congo y República Democrática del Congo.
Analistas internacionales atribuyeron el pronunciamiento al objetivo de presentar promesas atractivas ante la creciente participación de China y Rusia en las economías africanas, en un contexto signado por crecientes tensiones geopolíticas.
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