La medida avala la validez de los visados emitidos antes del 28 de marzo de 2020 y además contempla la reanudación del libre ingreso a la isla turística de Hainan, a pasajeros de cruceros que llegan a Shanghái y a visitantes a la provincia de Guangdong, procedentes de Hong Kong y Macao.
Ese permiso próximamente también se ofrecerá a viajeros del Sudeste asiático con destino a Guilin, en la región autónoma Zhuang de Guangxi.
De igual manera, China autorizó a las agencias especializadas añadir lugares como Francia, España, Nepal y Dinamarca al programa piloto que oferta paquetes boleto aéreo y hotel incluidos para los viajes turísticos en grupo, reanudados en febrero tras una interrupción de casi tres años por la pandemia.
Las turoperadoras deben asegurarse de que sus clientes tengan buen estado de salud y además velar por su seguridad en el extranjero.
El Gobierno también redoblará la supervisión sobre esas compañías para combatir cualquier acción ilegal en las operaciones, alteración en los precios y violaciones a las normas morales y sociales durante los viajes.
Ahora suman 60 países los autorizados por China como destinos de esa modalidad de turismo, pues antes dio luz verde a las salidas hacia 20 territorios, incluido Cuba, Rusia, Indonesia y otros territorios del Sudeste asiático.
Todas esas medidas siguen a la degradación en enero del manejo de la Covid-19 en el gigante asiático, el cese la cuarentena a los pasajeros internacionales y el comienzo de la entrega de pasaportes.
Se espera que de conjunto haya un gradual incremento de los vuelos desde y hacia China, pues todavía las conexiones aéreas siguen escasas y los precios boletos continúan muy elevados.
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