Al respecto, el ministro de Policía, Bheki Cele, advirtió contra declaraciones incendiarias actuales, que podrían incitar a la violencia.
Eso, advirtió, es un delito penal.
Estamos al tanto de muchas cuentas de redes sociales que afirman que miles de seguidores se están movilizando para apoyar las protestas, añadió Cele, y queremos alentar a nuestra gente a no creer todo lo que lee en las redes sociales.
Actuaremos con rapidez y decisión contra cualquier amenaza de interrupción, enfatizó el Ministro.
El cierre nacional programado para el lunes es organizado por el partido Economic Freedom Fighters (EFF) para exigir la renuncia del presidente Cyril Ramaphosa.
Por su parte, la ministra de la Presidencia Khumbudzo Ntshavheni advirtió a todos los que participarán en el cierre nacional que se aseguren de que no haya violencia pública e intimidación.
Sudáfrica, dijo, es un país gobernado por las leyes, por lo tanto, no se tolerará ninguna cantidad de anarquía el lunes durante la protesta.
Al comentar sobre el propósito del EFF, Ntshavheni envió un mensaje claro al pueblo: «el cambio de régimen a través de medios inconstitucionales no será tolerado en Sudáfrica».
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