En la madrugada se llevaron colchones, televisores, mesas y otros muebles de las instalaciones de Wahoo Bay Beach and Resort, situado entre Montrouis y Arcahie, sobre la Ruta Nacional 1, aunque no se lamentan pérdidas de vidas humanas, aseguró el funcionario.
También sugirió que podría tratarse de un conflicto territorial, no obstante, algunos medios de prensa señalaron que las bandas utilizan este caso para advertir a otros dueños de negocios sobre las consecuencias de incumplir sus demandas.
Mientras la situación de inseguridad en Haití se agrava, grupos armados utilizan la extorsión y el chantaje, además de los secuestros como formas de financiamiento.
De hecho, varias escuelas de la capital anunciaron la suspensión de las clases presenciales por ese fenómeno y el Ministerio de Justicia advirtió a los ciudadanos que pueden defenderse si alguien ingresa con violencia a sus propiedades, según lo establecido por ley, lo cual le valió muchas críticas, especialmente de los colegios de abogados.
La crisis de violencia del país caribeño empeoró con la ampliación de los territorios controlados por las pandillas, en especial en Puerto Príncipe, donde se dispararon los casos de secuestros, asesinatos y enfrentamientos entre las bandas.
La Policía admitió en varias ocasiones que no cuentan con los recursos para combatir a los grupos criminales y al menos una veintena de agentes fueron asesinados este año por las pandillas.
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