Aunque muy divididos en cuanto a apoyar o criticar la reforma a leyes electorales secundarias impulsadas por el presidente Andrés Manuel López Obrador co vistas a bajar los altos costos del INE, todas las bancadas estuvieron de acuerdo para rechazar la decisión judicial sobre la presidencia del instituto más criticado de México.
Los siete coordinadores de la Cámara de Diputados coincidieron en oponerse al tribunal al cual advirtieron que es imposible cumplir la sentencia de que solo mujeres integren la quinteta de aspirantes para la presidencia de ese órgano autónomo la cual quedará vacante al cumplir su mandato Lorenzo Córdova.
Para elegir a cuatro consejeros, incluido el nuevo presidente, fue necesario organizar cuatro quintetos, uno de ellos compuesto solo por mujeres de donde saldría la presidenta, y los demás mixtos, para asegurar la alternancia de género.
Esto porque en todos los años de creado, el INE ha sido dirigido solamente una vez, y de manera circunstancial, por una mujer.
En un pronunciamiento oficial, titulado “Por la defensa de la soberanía del Poder Legislativo”, los jefes de todas las bancadas informaron a los magistrados electorales que atender su instrucción implicaría “una afectación significativa a los derechos de 664 ciudadanas y ciudadanos” ya inscritos para aspirar a esos cargos, además de que el tribunal invade así las competencias de la cámara.
El presidente de la Junta de Coordinación Política y jefe de la bancada de Morena, Ignacio Mier, elevó el tono de sus críticas a los magistrados de quienes dijo se encuentran extraviados y pretenden convertir a la Cámara de Diputados en “el payaso de las cachetadas”.
La elección de los cuatro consejeros, sobre todo de su presidente Córdova y su vice Ciro Murayama, acérrimos enemigos del gobierno, ha generado mucho debate y caos, en particular al conocerse que ambos recibirán cada uno más de cien mil dólares solamente por finiquito del cargo, sin contar las prestaciones.
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