Oktay aseguró también que se han ido superando los problemas con el suministro eléctrico en la mayoría de las provincias afectadas y que continúan las labores para restablecer el servicio de agua.
El vicepresidente dijo que la prioridad del gobierno está en reubicar a los evacuados y facilitarles un albergue provisional, así como alimentos, y que se impulsen los trabajos dirigidos a reconstruir las ciudades que quedaron dañadas o destruidas.
Por ahora, la mayoría de los desplazados fueron ubicados en tiendas de campaña o en las llamadas ciudades contenedores.
En las 11 provincias afectadas por los sismos en el sureste de Türkiye vivían unos 14 millones de residentes nacionales, más 1,7 millones de ciudadanos sirios, lo que representa el 16 por ciento de la población total del país.
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