A pesar de la preocupación y rechazo de la comunidad internacional, Estados Unidos armó en la escena de la ONU la ilegal farsa de discutir el inexistente problema de Derechos Humanos de la RPDC, señaló en una declaración la diplomacia coreana.
La representación permanente de la RPDC ante la ONU denuncia y rechaza tajantemente la vil campaña de presión de Washington, calificándola de flagrante violación y grave desafío contra la dignidad y soberanía de nuestro Estado, subraya la nota oficial.
La declaración refiere que lo que debe ser cuestionado en el Consejo de Seguridad de la ONU es el cruel crimen antiético de Estados Unidos, que agrede a países soberanos y masacra a incontables civiles inocentes, violando la propia Carta de la ONU y otros tratados internacionales reconocidos.
La comunidad internacional ya reconoce esta maniobra de Estados Unidos como un reiterado mecanismo de intervención en los asuntos internos de otros países. La ONU no debe ser usada como un medio político con el que Washington ejerce sus caprichos sobre los Estados soberanos e independientes que no le agradan, advierte el texto.
Para asegurar la verdadera paz y estabilidad internacionales, y fomentar los genuinos derechos humanos, los países miembros de la ONU deberán rechazar totalmente la politización, discriminación y selectividad en los procederes del organismo multilateral y rechazar el despotismo y arbitrariedades de Estados Unidos y sus aliados, concluye la declaración.
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