Un comunicado de la Cancillería calificó de “pseudo Misión”, a ese grupo establecido a partir de una cuestionada resolución promovida por un reducido grupo de gobiernos, en muestra, afirmó, del palpable doble rasero y el uso político de los mecanismos internacionales de derechos humanos.
Manifestó que esto tiene la sola finalidad de seguir atacando a las instituciones venezolanas como parte de la política de “cambio de régimen”, impulsada por las autoridades de Estados Unidos.
La nota expresó que mientras Venezuela avanza cada vez más en su diálogo y cooperación con la Oficina del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, la infame Misión de Determinación de Hechos pretende seguir tergiversando la realidad con falsas matrices mediáticas.
Estas, opinó, dirigidas a dar aliento a los grupos más extremistas que constantemente intentan alterar la paz y atentar contras las instituciones democráticas del país.
La República Bolivariana ratificó que “no reconoce, ni reconocerá”, mecanismos de tutelaje o monitoreo como esta hostil Misión, que dilapida los recursos de la ONU y claramente transgrede los pilares fundamentales del multilateralismo y los principios que rigen las labores del Consejo de Derechos de Humanos (DDHH).
Además de los propósitos y principios consagrados en la Carta de las Naciones Unidas, las resoluciones pertinentes de la Asamblea General y demás instrumentos relevantes, añadió.
Venezuela reiteró su voluntad de seguir cooperando con el Consejo de DDHH y la Oficina del Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos.
Aseguró que siempre lo hará sobre la base del diálogo genuino y en estricto apego a los principios de objetividad, no selectividad, imparcialidad, respeto a la soberanía y no injerencia en los asuntos internos.
jha/jcd
