Tras una sesión extraordinaria del Consejo de Ministros dedicada al tema, Boluarte precisó que el Servicio Nacional de Meteorología e Hidrología (Senamhi) alertó al Gobierno de que a fines de este mes y durante abril, Perú sufrirá de los llamados Niño Costero y Niño Global.
Junto al primer ministro, Alberto Otárola, la mandataria indicó que el Gobierno ha tomado previsiones como el incremento de reservas de alimentos y otros productos necesarios para asistir a las poblaciones afectadas.
Otárola llamó a la unidad nacional ante la emergencia y señaló que los efectos del fenómeno climático serán similares a los registrados en años anteriores, el último entre diciembre de 2016 y mayo de 2017. En los últimos cinco siglos se ha producido 120 veces, según un informe del Ministerio del Ambiente.
La presidenta añadió que el Ejecutivo coordina con organismos como el Instituto Nacional de Defensa Civil (Indeci) y con los gobiernos regionales y municipios norteños y el ministro de Defensa, Jorge Chávez, anunció que se incrementará el número de militares que auxiliarán a la población en la emergencia.
La titular de Transportes y Comunicaciones, Paola Lazarte, anunció el reforzamiento de los puentes de todo el país para asegurar la transitabilidad y seguridad de las carreteras.
Tras la conferencia, el analista político Álvaro Campana, afirmó que el primer ministro Otárola “sigue buscando lavarle la cara al régimen autoritario y criminal, invocando a la unidad nacional para afrontar los desastres”.
Agregó que “un régimen que asesina y busca la impunidad está incapacitado para encarar los problemas que vive el país, en lo inmediato y estructuralmente”.
El Fenómeno El Niño fue precedido por una persistente temporada de lluvias que desde diciembre pasado ha dejado un saldo de 69 muertes y grandes daños materiales, sobre todo en el norte de la costa peruana y en la periferia de Lima.
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