La condena al bloqueo económico, comercial y financiero que por más de seis décadas impone Estados Unidos a Cuba fue el denominador común de ambas iniciativas, pero también el palpitar desafiante de esa nación antillana que persiste en su proyecto de igualdad y justicia social.
Después de recorrer las principales arterias de esta urbe, los activistas llegaron hasta los bustos del Héroe Nacional José Martí y el General Antonio Maceo, en el parque Belisario Porras, para fundirse en un abrazo de lealtad y compromiso con los integrantes de la misión estatal.
Una foto colectiva resumió sentimientos robustecidos en el tiempo de lo que el presidente de la Asociación Martiana de Cubanos Residentes en Panamá, Humberto Pérez, catalogó como una jornada para pedir mejores tiempos para la familia, pero también para exigir a Washington que excluya a Cuba de la espuria lista de países patrocinadores del terrorismo
Pérez comentó a Prensa Latina que esta caravana recordó los dos años de que comenzaran este tipo de acciones en marzo de 2021, siempre con una creciente participación de los movimientos de solidaridad, las organizaciones sindicales y sociales y autoridades locales, entre ellas agentes policiales.
A su turno, el embajador de Cuba en Panamá, Víctor Cairo, agradeció el respaldo a la postura en contra de la hostil política y sobre todo a esta especial jornada dominical, cuando sus connacionales deciden en elecciones generales a los 470 diputados de la Asamblea Nacional del Poder Popular (Parlamento).
Unidad y solidaridad frente a cualquier obstáculo se dan la mano aquí en defensa de una noble causa y son indetenibles, nos hacen invencibles, remarcó.
La solemne ceremonia tuvo una fraternal y deportiva extensión, según sus organizadores, cuando los participantes en la velada llegaron hasta la Ciudad del Saber para medirse en un amistoso de softbol a jugadores de la Federación Unitaria de la Clase Trabajadora.
Más allá de triunfadores o perdedores, el partido, que también contó con el apoyo del Sindicato de los Trabajadores de la Educación Nacional, es otra expresión de reciprocidad con la mayor de las Antillas y su pueblo, que sabe entregarlo todo en beneficio de los desposeídos, dijo Lilian Ruiz, de la Coordinadora Nacional de Solidaridad con Cuba en Panamá.
En esta lucha contra el criminal bloqueo, al decir de la poetisa Diana Morán, invocó la joven abogada, los panameños seremos tercos…»tercos de dulzura, tercos en la cárcel, en la muerte tercos, tercos y más tercos en la firma, tercos, terquísimos”.
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