Las compañías ofertaron por más de seis mil 734 kilómetros cuadrados del Golfo para el desarrollo de petróleo y gas, aunque se presentaron un total de 295 mil kilómetros cuadrados, apuntó el diario The Hill.
Las ventas, aseguró la fuente, constituyen parte de un requisito de la Ley de Reducción de la Inflación, incluido para asegurar el apoyo para la aprobación de la norma por parte del senador demócrata Joe Manchin.
“El alcance excesivo e imprudente de la venta de arrendamiento de petróleo y gas de hoy demuestra cuán urgentemente se necesita reformar nuestro programa federal de arrendamiento”, expresó el abogado de Earthjustice, George Torgun, en un comunicado.
La administración del presidente Joe Biden no solo realiza una venta de arrendamiento que está en desacuerdo con la ley, sino que también sucumbe a las necesidades de una industria rica en ganancias sobre el bienestar de las comunidades del Golfo, los ecosistemas vitales y nuestros objetivos climáticos urgentes, añadió.
Según un recuento del sitio de noticias Common Dreams, el gabinete actual aprobó seis mil 430 permisos para perforar petróleo y gas en tierras públicas en sus dos primeros años, una tasa más alta que la del gobierno precedente.
Asimismo, las críticas más recientes se debieron a la aprobación de un proyecto conocido como Willow, situado en Alaska.
Justo en el Ártico, una región donde los expertos alertan que se pierde el hielo aceleradamente, dicho enclave generará hasta 278 millones de gases nocivos en 30 años, según cálculos gubernamentales.
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