Avizorar el peligro del expansionismo norteamericano fue una cualidad de ambos luchadores revolucionarios, destacó el académico Elier Ramírez en la décima edición nacional del denominado Diálogo de Generaciones.
“Fidel Castro fue un aventajado discípulo del ideario y la praxis de José Martí”, dijo Ramírez, quien ponderó el humanismo y el antimperialismo de los dos patriotas de la nación antillana.
Los líderes mantuvieron una “postura cauta y viril” ante las amenazas y agresiones de sucesivos gobiernos yanquis, sin renunciar a un escenario de paz con el vecino país, ejemplificaron varios oradores en el evento.
En la cita se intercambiaron valoraciones sobre el papel de la Revolución cubana, y de las ideas martianas y fidelistas en la preservación del equilibrio entre los países de América. Esa influencia se refuerza en diversos mecanismos de integración como la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños, entre otros.
Durante la jornada de debates se presentaron ponencias, proyectos de extensionismo cultural, ejemplos de publicaciones impresas y de redes sociales digitales, así como experiencias de trabajo de organizaciones juveniles, relacionadas con el pensamiento de ambos revolucionarios.
En la ocasión fueron condecorados alrededor de 60 jóvenes de todo el país, con distinciones conferidas por su organización, y se inauguró una exposición con portadas de la revista Martillando, perteneciente al Movimiento Juvenil Martiano.
Diálogo de Generaciones es una iniciativa que se realiza desde 2013 bajo el auspicio del Movimiento Juvenil Martiano, a la cual se han sumado varias instituciones nacionales como el Centro Fidel Castro Ruz.
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