De esa manera, según la fuente, el número total de casos de la enfermedad se elevó a 10, entre los cuales se cuenta un fallecido.
Al respecto, el vocero del ministerio en la provincia, Foster Mohale, explicó que tras los análisis preliminares la fuente sospechosa de infecciones locales de cólera es el agua de los ríos Jukskei y Klip.
Los profesionales de la salud ambiental, agregó, se encuentran en esos lugares recolectando muestras de agua para analizarlas a fin de establecer si efectivamente esas fuentes están contaminadas con cólera.
El Ministerio, dijo Mohale, anunciará los resultados tan pronto como estén disponibles.
Los últimos casos registrados incluyen a dos personas (una pareja) habitantes del distrito de Diepsloot, al norte de Johannesburgo, quienes alegan haberse bautizado en el río Jukskei a principios de este mes, tras lo cual experimentaron problemas de salud.
Otro caso es el de una niña proveniente de la ciudad del municipio metropolitano de Ekurhuleni.
Acorde con los especialistas, las recientes lluvias experimentadas en la zona pudieran haber contribuido a la diseminación del cólera, cuyo mayor impacto suele producirse en comunidades pobres y asentamientos informales.
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