ese mes de la cantante María Callas.
Reconocida como la mayor soprano del siglo XX por su prodigiosa voz, La Divina, como la llamaban, contribuyó al arte operístico de la pasada centuria y fue capaz de revivir el bel canto -término musical italiano de técnica vocal más virtuosa- en su importante carrera.
El homenaje comienza en abril y se incluye en él una serie de actos conmemorativos, entre ellos, una nueva producción de ese género, una exposición en la Biblioteca Nacional de este país del sureste europeo y un documental de estreno sobre sus primeros años griegos.
Durante el transcurso de las jornadas de ocho meses se presentará contenido inédito extraído del archivo histórico de la GNO, a cargo del comisariado Giorgos Koumendakis, director artístico del recinto.
Según Koumendakis, a 100 años del nacimiento de Callas está latente la oportunidad de redefinir esa prodigiosa voz y su distinción como cantante.
Hablamos de una era anterior y posterior a la eminente artista, por tanto, es necesario mostrar aspectos de su personalidad musical para las nuevas generaciones, afirma.
El gran acontecimiento del homenaje es la obra «Medea», de Luigi Cherubini, primera gran coproducción de la Greek National Opera, con tres importantes teatros del género en Norteamérica la Canadian Opera Company, la Lyric Opera de Chicago y la Metropolitan Opera de Nueva York, ciudad donde nació Callas.
Maria Anna Cecilia Sofia Kalogeropulu, nombre completo de la artista, aun genera controversia por su peculiar registro vocal amplio y el dominio de la técnica, elementos que le permitieron interpretar roles, desde soprano ligera hasta dramáticos, pasando por mezzosoprano, todos alternados con éxito como parte de su esencia expresiva.
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