A través de un comunicado, las facciones palestinas afirmaron que la operación de la Venganza de los Libres es una nueva página de gloria en la respuesta contra los crímenes del ente de Tel Aviv.
En este sentido, confirmó la terminación de un ciclo de lucha, resistencia y firmeza; al tiempo que advirtió a la ocupación de no volver a la política de asesinatos.
La declaración saludó a los mártires de esta batalla, entre ellos los héroes de las Brigadas Al-Quds, ala militar del movimiento de la Yihad Islámica.
Según la agencia Wafa, un alto al fuego negociado por Egipto entró en vigor en la Franja de Gaza a las 22:00, hora local, para poner fin a un ataque israelí que cobró la vida de 33 palestinos, incluidos seis niños y tres mujeres; además de otros 160 heridos.
Antes, fuentes de la resistencia aseguraron al canal panárabe Al Mayadeen que la Yihad Islámica obtuvo una promesa israelí no anunciada de detener los asesinatos.
Por su parte, Al Qahera News divulgó que el pacto entre las partes incluyó un compromiso con un cese al fuego, así como dejar de atacar a civiles y detener la demolición de casas.
En este contexto, cientos de activistas por la paz ondearon en Tel Aviv banderas de Palestina y pancartas en árabe, inglés y hebreo, algunas de las cuales decían: «Alto a la guerra en Gaza», «Nuestros corazones están con Gaza», «No a la democracia con la ocupación», «Las vidas palestinas importan» y “No a la agresión a Gaza”.
Desde el martes, el enemigo israelí lanzó una agresión contra la sitiada Franja de Gaza desde el aire, el mar y la tierra que, además de las víctimas mortales, dejó pérdidas por alrededor de cinco millones de dólares, según el Gobierno palestino.
En respuesta, la resistencia palestina atacó con más de mil 100 misiles los asentamientos alrededor de Gaza y zonas en las profundidades de la entidad de ocupación, obligando a evacuar a más de 12 mil colonos, reflejaron medios israelíes.
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