El tribunal dictó la misma sanción para Thierry Herzog, abogado del otrora mandatario, y el alto magistrado Gilbert Azibert por el llamado «asunto de las escuchas».
El caso data del 2013, cuando en el contexto de investigaciones por financiamiento ilegal de su campaña presidencial del 2007, la justicia ordenó seguir las conversaciones de Sarkozy, lo cual reveló la existencia de una línea secreta utilizada para comunicarse con Herzog.
Según el expediente, el expresidente intentaba obtener a través del juez Azibert información sobre otra causa por financiamiento de su campaña, pero de 2012, a cambio de un ascenso para el magistrado.
La Corte de Apelaciones de París también se pronunció por la prohibición de los derechos cívicos de Sarkozy, quien quedó inelegible para cargos públicos.
Retirado de la política desde su derrota en las primarias de la derecha en 2016, el parisino de 68 años se convirtió en el primero de su rango en enfrentar la justicia de manera física durante la V República, ya que el jefe de Estado entre 1995 y 2007, Jacques Chirac, fue procesado y condenado en 2011 por empleos ficticios, aunque por razones de salud nunca estuvo en la corte.
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