De acuerdo con la jefa de la Comisión Europea (CE), Ursula von der Leyen, el plan incluye la unificación de estos países en el mercado único de la UE y la expansión de la cooperación económica regional.
También encierra la ampliación de las subvenciones financieras de las naciones balcánicas y la exigencia de que aceleren sus reformas.
En opinión de expertos locales, el objetivo final por el que la CE emprende todos estos esfuerzos es la independencia energética de la Federación de Rusia y la sincronización con la política de la UE.
Tales medidas, según ellos, necesariamente proporcionarán apoyo para todas las decisiones de sanciones de la UE, independientemente de las pérdidas de esas naciones.
Por otro lado, la exigencia de sincronizar la política exterior con la europea es uno de los requisitos básicos del ente para los países candidatos.
En este contexto, la falta de voluntad de Serbia y Hungría para cumplir con las sanciones europeas contra Rusia, a pesar de las fuertes presiones, provoca una gran irritación en Bruselas.
Varios países de la región se han visto con huelgas, que, según especialistas en el tema, son provocadas por una inflación vertiginosa y una economía en deterioro en medio de una crisis por el alza del costo de vida.
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