Cifras divulgadas en 2022 por el Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) confirmaron el aumento cada año del número de violaciones verificadas de niños afectados por las guerras.
De acuerdo con el informe 25 años de la infancia atrapada en los conflictos armados, entre 2014 y 2020 la media anual de menores muertos o mutilados alcanzó los 10 mil 500, sobrepasando los 104 mil menores en los últimos cinco lustros.
Naciones Unidas, además, verificó que cerca de ocho mil 700 niños son reclutados anualmente mientras que la cifra total durante la duración del estudió alcanzó los 25 mil 700.
Dos tercios de los casos confirmados por la ONU en los últimos 16 años se produjeron entre 2014 y 2020, con una media anual de dos mil 414 niños y niñas secuestrados.
Los varones representan las tres cuartas partes de estos, mientras que las niñas siguen corriendo un mayor riesgo, especialmente con fines de violencia y explotación sexual.
Sobre este último flagelo, el informe de Unicef documentó 14 mil 200 infantes afectadas por la violencia sexual con un promedio anual de 890 víctimas infantiles.
Sin embargo, el texto reconoce que la cifra no refleja la magnitud real del problema, ya que los casos de violencia sexual no suelen denunciarse en todo su amplitud.
De acuerdo con el organismo, estos datos representan una terrible tragedia para un niño o una niña, para una familia o una comunidad por lo que el Día Internacional de los Niños Víctimas Inocentes de Agresión reitera el llamado para detener los ataques en su contra.
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