Un reporte publicado este domingo en el diario Corriere della Sera, refiere que la legisladora Michaela Biancofiore, líder de la bancada senatorial del partido derechista Noi Moderati, introdujo un proyecto para permitir el acceso de mascotas a ese recinto parlamentario.
La propuesta cuenta con un amplio apoyo, incluso del presidente de ese órgano legislativo, Ignazio La Russa, quien declaró que confía en que el 22 de junio, cuando en muchas naciones se celebre el denominado Día Mundial de llevar el perro al trabajo, “se lance este nuevo reglamento”.
“Creo que es inaceptable que las mascotas puedan entrar por todos lados y no puedan hacerlo solo en las oficinas de quienes escriben las leyes, incluida la reforma constitucional que incluyó la protección de los animales”, argumentó Biancofiore al presentar el documento.
Llevar a estos animales a la oficina “se considera no solo normal sino útil”, aseveró la senadora, y añadió que de esa manera el personal parlamentario “será más productivo, sin la preocupación por haber dejado solo a su amigo”.
El reglamento propuesto hace alusión a las leyes nacionales y se refiere además a la posición favorable a este tema que asumen instituciones internacionales, desde el Consejo de Europa hasta la Organización de Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura.
Se establece en el mismo el acceso de los animales únicamente en los espacios «destinados a la actividad de los grupos parlamentarios, oficinas de senadores y empleados» excluyendo zonas comunes, como el Pleno de ese órgano, las salas donde se reúnen las comisiones, bibliotecas y comedores, entre otras.
Las mascotas deben entrar por un acceso diferente al principal del Palazzo Madama, sede del Senado, y los perros tendrían que llevar correa, mientras que para los gatos se establece el uso de un transportín, además de preverse en el texto rigurosas medidas de higiene, precisa la fuente.
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