El ministro de Asuntos Exteriores, Christophe Lutundula, expresó en un comunicado que ataques con la aviación militar en una zona ocupada por la población civil y desarmada, incluidos extranjeros, también provocaron heridas a otras personas, entre ellos compatriotas.
El pronunciamiento de Lutundula tiene lugar cuando, según medios de prensa, los bombardeos aéreos se intensificaron en las áreas occidentales de Jartum, luego de que el fin de semana finalizó la última tregua pactada entre el Ejército y las RSF (por sus siglas en inglés).
Testigos presenciales reportaron una profundización de la anarquía en la referida ciudad y en la región occidental de Darfur.
Informes recientes de organizaciones médicas estiman que debido a la guerra interna las muertes de civiles en Sudán sobrepasan el millar, con más de seis mil heridos y numerosos desaparecidos y desplazados.
Los choques armados en territorio sudanés estallaron el pasado 15 de abril por contradicciones entre los liderazgos de las tropas gubernamentales y de las RSF, en relación con la integración de ese último ente al Ejército.
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