Choquehuanca ofreció una charla a oficiales del Instituto de Altos Estudios Nacionales de la República Bolivariana de Venezuela, quienes realizan un viaje académico al Estado Plurinacional.
En el auditorio de la Escuela Militar de Ingeniería del sur de La Paz, también se encontraban jerarcas de las instituciones de Altos Estudios Nacionales y Escuelas de Comando y Estado Mayor Naval de Bolivia, ante quienes el vicemandatario abordó la Geapolítica del Vivir Bien, argumentada en un libro de su autoría.
Durante su plática, la autoridad enfatizó en la importancia de “la hermandad y la unidad tanto a nivel individual como colectivo, superando divisiones entre norte y sur, oriente y occidente en el marco de la política del Vivir Bien y la Geapolítica”.
Al insistir en la necesidad de sustituir el paradigma antropocéntrico por uno biocéntrico que respete todo lo viviente, Choquehuanca llamó a poner fin a la división impuesta en el mundo tras la Segunda Guerra Mundial, y abogó por un camino de hermandad, equilibrio y verdad.
El autor del volumen Geapolítica del Vivir Bien reafirmó el criterio de que, con el tiempo, desde el sur del continente, emergerán vigorosos los «guerreros del arcoíris» para devolver la armonía al planeta.
Dentro de esta visión, rindió tributo a la Wiphala, símbolo patrio al que aludió como la codificación del arcoíris, según una nota institucional de la Vicepresidencia.
Subrayó que, a pesar de la falta de reconocimiento en las escuelas y universidades sobre estos temas, la Wiphala siempre está presente, como lo establece la Constitución Política del Estado de Bolivia.
Aunque “los saboteadores pueden intentar confundir y sabotear el camino de retorno al equilibrio, no pueden detenerlo ni eliminarlo”, concluyó Choquehuanca.
En el libro, Choquehuanca expone que “frente a la geopolítica de dominación y sometimiento, emerge la geapolítica del vivir bien desde la rebeldía de los pueblos, desde el corazón de nuestra Pacha Mama, desde el indomable Abya Yala (tierra madura de la eterna juventud en permanente renovación)”.
Agrega que esta concepción tiene como objetivo restaurar el camino de la hermandad, de la complementariedad, del consenso, de la armonía y de la paz, ubicando en el centro de la acción política nacional e internacional a Gea, Pacha Mama, la Madre Tierra.
“Todos los que nos alimentamos con la leche de la Madre Tierra (agua) somos hermanos, humanos, plantas y animales, semejantes y diferentes que nos complementamos”, concluye el autor.
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