“La situación es lo suficientemente tensa porque, efectivamente, la amenaza de sabotajes por parte de Kiev es alta. Los sabotajes podrían tener consecuencias catastróficas”, advirtió el vocero.
Además, señaló que el Gobierno ucraniano demostró en repetidas ocasiones su voluntad de “no escatimar” ninguna medida para desestabilizar la situación.
“Recientemente lo vimos en la destrucción de la central hidroeléctrica de Kajovka, que también tuvo horribles consecuencias, así que, por supuesto, se toman todas las medidas para contrarrestar esta amenaza”, añadió.
Según información del asesor del director general de la empresa Rosenergoatom, Renat Karchaa. Ucrania desconectó anoche la línea eléctrica del Dniéper, la cual suministra electricidad a la central nuclear de Zaporozhie.
El 23 de junio, el vicecanciller ruso, Serguéi Riabkov, calificó de denigrantes las acusaciones del presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, sobre la supuesta preparación de un ataque terrorista del país euroasiático en la planta de energía nuclear de Zaporozhie, que permanece bajo el control de las tropas rusas y es considerada la mayor central nuclear de Europa y una de las 10 mayores del mundo.
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