En declaraciones a la Revista en Vivo del canal 4, el titular del Mific señaló que Nicaragua es un país de oportunidades para los empresarios chinos, teniendo en cuenta el proceso de desarrollo y crecimiento, en el cual está inmersa la nación centroamericana.
Aludió al TLC como una oportunidad para convertir a China en uno de los principales proveedores de materia prima, insumos, capital y bienes de consumo, maquinaria y equipos que no se producen aquí.
«Y que también se convierta China en un comprador de nuestras exportaciones, principalmente agropecuarias y las de zonas francas que tenemos ahí un desarrollo industrial que es importante aprovechar”, subrayó.
Según el funcionario, el 71 por ciento de todas las exportaciones actuales de Nicaragua, que representan el 80 por ciento de sus principales productos, gozarán de un libre comercio a partir de la entrada en vigencia del TLC en enero de 2024.
De acuerdo con Bermúdez, el TLC con la nación asiática se negoció de forma tal que el acceso fuera lo suficientemente amplio para desarrollar otros productos que aún no se exportan, pero tienen potencial para ello.
“Creemos que fue un tratado bastante balanceado, ganar-ganar para ambos países, pero poniendo sobre la mesa cuáles eran nuestros intereses y cuáles también nuestras sensibilidades”, expresó.
Añadió que, si se tiene en cuenta el contexto internacional en el ámbito comercial con sanciones y trabas para Managua al comercio regional, bilateral y multilateral, Beijing constituye un socio político y económicamente seguro.
Resaltó la importancia de que los productores nicaragüenses hagan un esfuerzo más amplio para aprovechar el mercado chino, pues es de gran escala, por lo cual prevén impulsar a nivel interno la asociatividad entre los productores para cumplir con las demandas de los empresarios.
Nicaragua firmó el TLC con China a finales de agosto último tras un año de negociaciones, luego del restablecimiento de las relaciones diplomáticas entre ambos países en diciembre de 2021.
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