Ese es el camino de la República Bolivariana y “siempre insistiremos en construir un mundo sin odios ni violencia, donde prevalezca la solidaridad humana y la justicia social”, escribió el jefe de Estado en su cuenta X, antes Twitter.
La Asamblea General de las Naciones Unidas promulgó el 21 de septiembre de 1981 como el Día Internacional de la Paz, con el objetivo de conmemorar los ideales de paz de cada pueblo y cada nación.
La fecha hace especial énfasis en el desarrollo social y económico en cuestiones como la pobreza, el hambre, salud, educación, cambio climático, igualdad de género, agua, saneamiento, electricidad, medioambiente y justicia social.
En el año 2001 el organismo de la ONU también designó este día como Jornada de No Violencia y Alto al Fuego, la cual está recogida en el artículo tres de la Declaración Universal de los Derechos Humanos y plantea que “todo individuo tiene derecho a la vida, a la libertad y a la seguridad de su persona”.
La ONU celebra este año el Día Internacional de la Paz con el lema Acciones para la Paz: nuestra ambición para los Objetivos Mundiales, con el que convoca a la responsabilidad individual y colectiva a conseguir los Objetivos Mundiales.
En la Cumbre de los Objetivos de Desarrollo Sostenible celebrada en pasado lunes en Nueva York, el canciller Yván Gil, reafirmó el fiel compromiso de Venezuela para encontrar soluciones que coadyuven a alcanzar los resultados esperados en materia de desarrollo sostenible.
Consideró que estas deberían ser solidarias, multidimensionales, diferenciadas, concretas, inmediatas, inclusivas, innovadoras y concertadas para que impulsen el desarrollo y cumplir con el fin último propuesto de “no dejar a nadie atrás”.
El jefe de la diplomacia bolivariana manifestó que para su país la estrategia global para el desarrollo debe incluir en sus decisiones consideraciones éticas y diferenciadas enmarcadas en el desarrollo sostenible.
La víspera el viceministro venezolano para Temas Multilaterales, Rubén Darío Molina, reafirmó el compromiso con la Agenda 2030 al intervenir, en nombre del Grupo de Amigos en Defensa de la Carta de la ONU, en el segmento de alto nivel sobre financiación al desarrollo de 2023.
Molina insistió en la necesidad de que sean levantadas de manera “completa, inmediata e incondicional” las medidas coercitivas unilaterales contra los pueblos del mundo.
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