La organización denunció, en una declaración, que es un acto aberrante y violatorio de todas las normas del Derecho Internacional, porque el Gobierno sionista tiene prisioneros a dos millones de personas en una ciudad en ruinas, a la cual decidió interrumpirle los servicios vitales como el envío de suministros médicos, agua y la electricidad.
´´Bajo un bloqueo total y una campaña de bombardeos indiscriminados, Israel el gobierno está masacrando mujeres, niños y ancianos sin reparo alguno´´, subraya el texto al cual tuvo acceso Prensa Latina.
Denuncia además como este acontecimiento ocurre ante la vista complaciente de los países occidentales que no solo apoyan el sionismo desde su discurso, sino que envían recursos materiales para incrementar el número de muertos de la parte Palestina.
Condena expresamente a las personas que están robándoles la vida, los sueños, los deseos de crecer y de vivir a miles de niños que quedarán traumados para siempre ante tanto odio y destrucción.
Igualmente, apoya el derecho del pueblo palestino a tener el control de su territorio, formar un Estado y recibir compensación por el más de medio siglo de ocupación, así como los esfuerzos en dirección a la paz cuyo resultado derive en la creación del estado de Palestina.
El texto señala que Israel es un estado invasor, que no reconoce las leyes internacionales, pues desde el año 1948 sus fronteras con Palestina fueron fijadas por las Naciones Unidas, lo cual no ha sido respetado, invadiendo una y otra vez territorio árabe.
En cada invasión -resalta-los enfrentamientos han sido entre los civiles de esas comunidades y uno de los ejércitos mejor equipados del mundo. La asimetría en ese conflicto ha llegado al punto de trascender para la historia las imágenes de niños y jóvenes enfrentando tanques con palos y piedras.
Igualmente, agrega que observan con preocupación las espirales de odio en las redes sociales en torno a este tema, porque muchos han perdido la perspectiva de este hecho o caen como víctimas de noticias falsas y sofisticadas narrativas de propaganda de guerra.
“Sigue siendo una pelea de David versus Goliat, solo que está vez, David es el pueblo palestino”, añade la declaración.
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