Sindicatos británicos rechazan congelación salarial en sector público
Sindicatos británicos rechazan congelación salarial en sector público
Sindicatos británicos rechazan congelación salarial en sector público
26 de noviembre de 2020, 9:27Londres, 26 nov (Prensa Latina) Los sindicatos del Reino Unido condenaron hoy la decisión del gobierno de congelar los salarios de un millón 300 mil trabajadores del sector público, como parte de un reajuste presupuestario por la Covid-19.
La medida, que fue anunciada la víspera en el Parlamento por el ministro de Hacienda, Rishi Sunak, contempla un aumento de sueldo para el sector de la salud, y un incremento de 333 dólares para los empleados que devengan menos de 24 mil libras (unos 32 mil dólares) anuales, pero deja fuera a policías, bomberos, maestros, empleados públicos y miembros de las fuerzas armadas.
Esta congelación de salarios afectará a trabajadores claves que lo arriesgaron todo durante la pandemia, alertó Rehana Azam, directora nacional del GMB, uno de los mayores sindicatos generales del país, tras acusar al gobierno de intentar sembrar la división dentro de sus filas.
Mark Serwotka, secretario general del gremio de los servicios comerciales y públicos, declaró, por su parte, que sus afiliados se sienten traicionados por el gobierno, mientras que el líder del sindicato del Transporte, Mick Cash, no descartó ir a la huelga.
La poderoso Unison, que agrupa a más de un millón 400 mil trabajadores, consideró, por su parte que se trata de un caso de 'austeridad simple y llana,' en alusión a los recortes aplicados por los gobiernos conservadores durante los últimos 10 años.
La legisladora laborista Anneliese Dodds, quien se desempeña como contraparte del ministro de Hacienda en el llamado gabinete a la sombra (opositor), también recalcó este jueves que la decisión de congelar los salarios de una parte del sector público no fue correcta.
En opinión de Dodds, el gobierno debió aprovechar la revisión del presupuesto para tratar de reconstruir la economía, recuperar puestos de trabajo y restaurar la confianza pública en su gestión.
Según pronosticó Sunak la víspera, el Reino Unido sufrirá en 2020 su peor contracción económica de los últimos 300 años, cuando se espera que el Producto Interno Bruto caiga en un 11,3 por ciento por el impacto de la Covid-19.
El funcionario agregó que la economía británica solo comenzará a recuperar los niveles de crecimiento previos a la pandemia a partir del cuarto trimestre de 2022.
Como parte del reajuste, el gobierno conservador del primer ministro Boris Johnson decidió también recortar la ayuda internacional para el desarrollo en alrededor de cinco mil millones de dólares, lo que generó una oleada de criticas de parte de las organizaciones no gubernamentales e instituciones caritativas, que lo acusaron de abandonar a los países más pobres en momento que en esos fondos les son más necesarios que nunca.
agp/nm
Esta congelación de salarios afectará a trabajadores claves que lo arriesgaron todo durante la pandemia, alertó Rehana Azam, directora nacional del GMB, uno de los mayores sindicatos generales del país, tras acusar al gobierno de intentar sembrar la división dentro de sus filas.
Mark Serwotka, secretario general del gremio de los servicios comerciales y públicos, declaró, por su parte, que sus afiliados se sienten traicionados por el gobierno, mientras que el líder del sindicato del Transporte, Mick Cash, no descartó ir a la huelga.
La poderoso Unison, que agrupa a más de un millón 400 mil trabajadores, consideró, por su parte que se trata de un caso de 'austeridad simple y llana,' en alusión a los recortes aplicados por los gobiernos conservadores durante los últimos 10 años.
La legisladora laborista Anneliese Dodds, quien se desempeña como contraparte del ministro de Hacienda en el llamado gabinete a la sombra (opositor), también recalcó este jueves que la decisión de congelar los salarios de una parte del sector público no fue correcta.
En opinión de Dodds, el gobierno debió aprovechar la revisión del presupuesto para tratar de reconstruir la economía, recuperar puestos de trabajo y restaurar la confianza pública en su gestión.
Según pronosticó Sunak la víspera, el Reino Unido sufrirá en 2020 su peor contracción económica de los últimos 300 años, cuando se espera que el Producto Interno Bruto caiga en un 11,3 por ciento por el impacto de la Covid-19.
El funcionario agregó que la economía británica solo comenzará a recuperar los niveles de crecimiento previos a la pandemia a partir del cuarto trimestre de 2022.
Como parte del reajuste, el gobierno conservador del primer ministro Boris Johnson decidió también recortar la ayuda internacional para el desarrollo en alrededor de cinco mil millones de dólares, lo que generó una oleada de criticas de parte de las organizaciones no gubernamentales e instituciones caritativas, que lo acusaron de abandonar a los países más pobres en momento que en esos fondos les son más necesarios que nunca.
agp/nm
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26 de noviembre de 2020, 9:27Londres, 26 nov (Prensa Latina) Los sindicatos del Reino Unido condenaron hoy la decisión del gobierno de congelar los salarios de un millón 300 mil trabajadores del sector público, como parte de un reajuste presupuestario por la Covid-19.
La medida, que fue anunciada la víspera en el Parlamento por el ministro de Hacienda, Rishi Sunak, contempla un aumento de sueldo para el sector de la salud, y un incremento de 333 dólares para los empleados que devengan menos de 24 mil libras (unos 32 mil dólares) anuales, pero deja fuera a policías, bomberos, maestros, empleados públicos y miembros de las fuerzas armadas.
Esta congelación de salarios afectará a trabajadores claves que lo arriesgaron todo durante la pandemia, alertó Rehana Azam, directora nacional del GMB, uno de los mayores sindicatos generales del país, tras acusar al gobierno de intentar sembrar la división dentro de sus filas.
Mark Serwotka, secretario general del gremio de los servicios comerciales y públicos, declaró, por su parte, que sus afiliados se sienten traicionados por el gobierno, mientras que el líder del sindicato del Transporte, Mick Cash, no descartó ir a la huelga.
La poderoso Unison, que agrupa a más de un millón 400 mil trabajadores, consideró, por su parte que se trata de un caso de 'austeridad simple y llana,' en alusión a los recortes aplicados por los gobiernos conservadores durante los últimos 10 años.
La legisladora laborista Anneliese Dodds, quien se desempeña como contraparte del ministro de Hacienda en el llamado gabinete a la sombra (opositor), también recalcó este jueves que la decisión de congelar los salarios de una parte del sector público no fue correcta.
En opinión de Dodds, el gobierno debió aprovechar la revisión del presupuesto para tratar de reconstruir la economía, recuperar puestos de trabajo y restaurar la confianza pública en su gestión.
Según pronosticó Sunak la víspera, el Reino Unido sufrirá en 2020 su peor contracción económica de los últimos 300 años, cuando se espera que el Producto Interno Bruto caiga en un 11,3 por ciento por el impacto de la Covid-19.
El funcionario agregó que la economía británica solo comenzará a recuperar los niveles de crecimiento previos a la pandemia a partir del cuarto trimestre de 2022.
Como parte del reajuste, el gobierno conservador del primer ministro Boris Johnson decidió también recortar la ayuda internacional para el desarrollo en alrededor de cinco mil millones de dólares, lo que generó una oleada de criticas de parte de las organizaciones no gubernamentales e instituciones caritativas, que lo acusaron de abandonar a los países más pobres en momento que en esos fondos les son más necesarios que nunca.
agp/nm
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