En su intervención en el foro sobre el tema, organizado por la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal), enumeró Quarless los problemas que socavan el progreso en la región, entre ellos la exposición a los choques externos y el devastador impacto del cambio climático.
A ello se suman las consecuencias de la Covid-19, una deuda externa que representa entre el cinco y el seis por ciento del Producto Interno Bruto, elevadas tasas de pobreza, baja creación de empleos, migración de personas capacitadas y una población que envejece.
“La promesa de la Agenda 2030 sigue siendo un sueño para los pequeños Estados insulares”, afirmó la funcionaria.
Ante esta realidad, el área necesita financiamiento para el desarrollo, apoyo de parte de asociaciones, de la cooperación Sur-Sur y la triangular, dijo.
Todos estos temas serán abordados en la cuarta conferencia sobre desarrollo sostenible, que se efectuará en mayo en Antigua y Barbuda.
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