El Consejo de Seguridad fue testigo de otra página oscura en la que Estados Unidos usó el veto de manera arbitraria y vergonzosa, y por cuarta vez consecutiva su desde el inicio de la guerra israelí hace más de cuatro meses contra Gaza, afirmó el Ministerio de Asuntos Exteriores y Expatriados.
Agregó que el uso del veto por parte de Washington constituye una prueba flagrante de su hipocresía y de la falsedad de sus afirmaciones de estar interesado en preservar los derechos humanos en todo el mundo, y una prueba de su continuo apoyo a la maquinaria asesina israelí contra el pueblo palestino.
La Cancillería destacó la necesidad de que el Consejo de Seguridad asuma sus responsabilidades para detener los crímenes de genocidio cometidos por Israel y de preservar las vidas de los palestinos.
Por último, ratificó el apoyo a los derechos legítimos del pueblo palestino, el más importante de los cuales es construir su estado independiente, con Jerusalén como su capital.
Aunque 13 países de los 15 miembros del Consejo votaron a favor del proyecto de resolución, el uso del veto de Estados Unidos, miembro permanente del Consejo, impidió la adopción del proyecto mientras que Gran Bretaña se abstuvo de votar.
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