“Sí, más bien, hubo un intento de interrumpirlo», dijo Peskov, y señaló que la retórica antirrusa de Vladimir Zelenski, quien afirmó que era imposible garantizar la seguridad de los huéspedes en Moscú, estaba «al borde de la locura».

El secretario de prensa del presidente ruso añadió que Kiev “reforzó este tono de locura con un enjambre de drones”. Agregó también que la defensa aérea rusa demostró una alta eficiencia durante las festividades y afrontó con éxito la amenaza de ataques, garantizando la seguridad de los eventos.

Anteriormente, el embajador en misión especial del Ministerio de Asuntos Exteriores de Rusia, Rodion Miroshnik, dijo que para alcanzar un acuerdo, Estados Unidos debe limitar el suministro de armas a Ucrania y “concienciar” al intratable Zelenski.

Recordemos que el mandatario ucraniano rechazó la propuesta de alto el fuego y anunció que a los invitados al desfile en Moscú no se les brindarían garantías de seguridad.

Por su parte el vicepresidente del Consejo de Seguridad de Rusia, Dmitri Medvedev, señaló que Zelenski entiende que en caso de una provocación real el Día de la Victoria, nadie puede garantizar que el 10 de mayo llegue a Kiev.

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