En el coloquio organizado por la Unión Internacional de los Ulemas de la Resistencia, el vicejefe del movimiento rechazó el objetivo de Washington de controlar la región y “reformularla de manera que sea libre de subyugar a quienes confrontan la arrogante decisión estadounidense”.
Al respecto, Qassem enfatizó en que si no fuera por el apoyo de la Casa Blanca, Israel no habría podido continuar la guerra en la Franja durante días.
Sobre este tema, subrayó que la agresión contra Gaza en primer lugar es estadounidense, con el objetivo de aniquilar al pueblo palestino, y no es una reacción a la operación Diluvio de Al-Aqsa del 7 de octubre.
En su valoración, precisó que la embestida constituye un acto sistemático y organizado para destruir la vida en Gaza y un mensaje israelí al mundo entero de que no puede haber una resistencia a la entidad.
Tras casi cinco meses de crímenes, el dirigente de Hizbulah apuntó la incapacidad de Israel de eliminar la resistencia y los planes de Estados Unidos de calmar la atmósfera y mantener el bloqueo de hambre para lograr sus objetivos.
«El pueblo palestino demostró que es capaz y grande, y es un símbolo de humanidad, digno de victoria y de vida, y da lecciones al mundo sobre libertad», manifestó.
Al respecto, añadió que la continuación de los bombardeos israelíes es absurdo porque mata a los indefensos y destruye hogares; mientras, Tel Aviv no logró ningún paso para eliminar la resistencia y no liberó a los prisioneros.
En este sentido, resaltó los sacrificios del pueblo de Gaza y la firmeza en la batalla hasta alcanzar una Palestina libre.
Ante este escenario, Qassem insistió en el deber de apoyar a Gaza y en el interés real y directo en Líbano y la región para que Israel no amplíe su ocupación de esas tierras.
Respecto al frente libanés, el vicesecretario general de Hizbulah advirtió a Israel sobre cometer alguna tontería contra el país y renovó la posición de detener la agresión en Gaza como primer paso para cualquier mediación.
Líderes religiosos, ulemas sunitas y chiitas libaneses y palestinos analizaron en la conferencia como socorrer al pueblo en Gaza luego de meses de masacres, bombardeo, asedio y genocidio israelí, así como el silencio de las grandes potencias y los gobiernos sometidos al poder de Estados Unidos y Occidente.
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