El representante de Unicef en el país, Antero Almeida de Pina, reconoció que si bien queda mucho camino por recorrer para mejorar el acceso de la población al saneamiento básico, especialmente en los centros urbanos, el país ha avanzado positivamente en los últimos años.
Almeida de Pina resaltó que Angola tiene identificados los desafíos financieros del sector de agua y saneamiento e higiene, que implica la necesidad de desarrollar sistemas de aguas residuales en más provincias y de aumentar la distribución geográfica de los fondos destinados al saneamiento.
Con una población estimada que supera los 30 millones de personas, las cifras indican que aún más de siete millones de angoleños no reciben servicios básicos.
Este es uno de los temas contemplados en el Plan de Desarrollo Nacional (PDN) 2023-2027, donde se concibe la gestión integrada del sector del agua como factor determinante del desarrollo económico y social.
Al respecto señala que el trabajo en este sector estará encaminado a satisfacer las necesidades de los distintos sectores de la economía, así como de la creciente población, además de implementar políticas ambientales efectivas que contribuyan a la preservación de los recursos naturales y promuevan el desarrollo sostenible.
El crecimiento demográfico del país, aproximadamente un 3,1 por ciento por año, demanda acciones inmediatas para garantizar el acceso al agua potable y la mejora del saneamiento, tanto en las zonas urbanas como en las rurales, lo cual se prevé dentro del PDN 2023-2027.
El Programa de Lucha contra los Efectos de la Sequía en el Sur de Angola resulta un elemento importante en esta proyección, en tanto contempla la construcción de canales, pasos entre cuencas y embalses, y la rehabilitación de decenas de presas en las provincias de Cunene, Namibe y Huíla.
Con un presupuesto de cuatro mil 500 millones de dólares y trabajos planificados para unos ocho años, el principal objetivo es garantizar el acceso al líquido, tanto para consumo humano como animal, además de mejorar la calidad de vida de la población de esta región angoleña y propiciar el desarrollo agrícola.
Se estima que alrededor de 600 mil familias se beneficiarán del programa al promover la agricultura familiar.
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