Según la investigación, el 58 por ciento de los alemanes se opone a suministrar a Ucrania misiles Taurus de largo alcance, mientras que solo el 28 por ciento se pronuncia a favor de la idea.
La mayoría de los votantes también apoyó la oposición del canciller federal, Olaf Scholz, al despliegue de tropas alemanas en Ucrania.
Un 72 por ciento de los encuestados afirmó que Scholz hizo lo correcto la semana pasada al oponerse claramente al despliegue de tropas, mientras solo el 16 por ciento indicó que el gobierno debería mantener abierta esta opción.
La encuesta fue encargada por la agencia de prensa alemana DPA y realizada por YouGov entre el 1 y el 5 de marzo entre una muestra representativa a nivel nacional de dos mil 169 personas.
El presidente francés, Emmanuel Macron, sorprendió a las capitales europeas la semana pasada al sugerir que se podrían desplegar tropas occidentales en Ucrania para apoyarlos en el conflicto armado.
Scholz rechazó inmediatamente la sugerencia de Macron y reafirmó su posición de larga data de que los aliados occidentales deberían abstenerse de cualquier medida que pudiera conducir a un conflicto directo entre la Organización del Tratado Atlántico del Norte y Rusia.
El político socialdemócrata también dejó claro la semana pasada que no aprobaría el envío de misiles Taurus de fabricación alemana a Ucrania, pues requeriría la asignación de soldados para esta misión o su despliegue en Ucrania.
Pero importantes legisladores de sus socios de coalición, los Verdes y el liberal FDP, criticaron abiertamente la postura de Scholz y han pedido al canciller federal que reconsidere su enfoque y proporcione a Ucrania los misiles.
Los cohetes de crucero tienen un alcance de más de 500 kilómetros (310 millas) y, según sus características, tienen efectividad en apuntar adecuadamente a objetos, incluidos puentes, u objetivos duros y profundamente enterrados, como búnkeres de mando.
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