De acuerdo con el informe, cinco de los 15 crímenes de ese tipo cometidos en 2023 corresponden a ese grupo etario, mientras tres corresponden a niñas y adolescentes de 10 a 19 años de edad.
Las estadísticas corresponden a los análisis de organizaciones no gubernamentales y organismos como el Ministerio Público (MP), el Observatorio de Feminicidios y el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef).
La Unicef por ejemplo subraya que buena parte de las niñas y adolescentes asesinadas en el istmo han sido objeto de violencia sexual.
Mientras los Juzgados de Niñez y Adolescencia del país istmeño, indican que desde 2010 hasta 2022, el abuso sexual hacia niñas, niños y adolescentes pasó de 660 a mil 393.
Los datos del Observatorio, que se basan en comunicados de la Fiscalía, agrega el rotativo, revelan que cuatro mujeres de entre 30 y 39 años fueron asesinadas. Mientras que otras dos tenían entre 40 y 49 años y una más de 61 años.
Además el informe revela el 53 por ciento de los feminicidios fueron cometidos por la pareja o expareja de las víctimas, la mayoría en su residencia.
Entre enero y febrero de este año, se reportaron tres mil 621 denuncias agrega el MP, que además señala a la provincia de Panamá Oeste (distritos de Arraiján, La Chorrera, Capira, Chame y San Carlos) con la mayor cantidad de estos casos.
En Panamá el feminicidio está tipificado en el Código Penal y las condenas por este delito oscilan entre los 25 y 30 años de cárcel.
El pasado 8 de marzo, en ocasión del Día Internacional de la Mujer, diversas organizaciones femeninas marcharon en la capital de la nación canalera para reclamar sus derechos elementales, en especial a la vida.
En declaraciones Prensa Latina, Luisa Fuentes, coordinadora y miembro de la Red de Mujeres Trabajadoras de Panamá, aseveró que se mantendrán movilizadas hasta conseguir equidad social, económica y política, además que cesen las violaciones de todo tipo a las que son sometidas.
También la candidata presidencial independiente, Maribel Gordón, llamó a defender a las mujeres de un Estado violento sin políticas públicas que las protejan, y rechazó que más de cuatro mil jóvenes sean violentadas y ante ello los Gobiernos de turno se cruzan de brazos; sin contar los casos de embarazo precoz, cuando en lugar de defenderlas, las excluyen.
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