Torres anunció su dimisión al salir del Palacio de Gobierno y pidió a los periodistas que apoyen y dejen gobernar a la mandataria, a la cual respaldó ante los problemas que tiene por la posesión no declarada de relojes de lujo, de ahí que es investigada por posible enriquecimiento ilícito.
Sostuvo que se retira por motivos familiares de salud y negó que deje el Gobierno bajo presión del Congreso, aunque casi todas las bancadas pedían su dimisión por considerar deficiente su labor contra la desbordada criminalidad.
Torres fue el sexto ministro del Interior en 16 meses de la administración de la presidenta Dina Boluarte.
Horas antes, tras un diálogo de congresistas con el primer ministro Gustavo Adrianzén, la legisladora conservadora Maricarmen Alva refirió que en la cita el anfitrión les dijo que el gobierno reemplazaría entre hoy y mañana a dos o tres ministros.
Según trascendidos recogidos por la prensa, en una reunión anterior de Adrianzén con la bancada de Fuerza Popular, partido de derecha extrema y primera fuerza del Legislativo, la agrupación le planteó que cambie a Torres y otros dos titulares.
Esa petición, de acuerdo con los trascendidos, fue planteada tácitamente como condición para que la bancada vote por la confianza (ratificación) de Adrianzén y el gabinete ministerial, sin la cual todos tendrían que renunciar a sus cargos.
La prensa considera seguro el voto de confianza en el nuevo gabinete y el diario La República afirmó que será la ratificación de un pacto corrupto con el bloque parlamentario de derecha extrema y centro, afirmado en días pasados con el respaldo que ese frente dio a Boluarte ante la investigación de la que es objeto.
npg/mrs





