El juez presidente del Tribunal de Distrito de Estados Unidos en San Juan, Raúl Arias Marxuach, impuso además tres años de libertad supervisada y la restitución de seis millones de dólares.
Santamaría, de origen colombiano, podrá entregarse a más tardar el próximo 2 de mayo a los alguaciles en el tribunal federal en Puerto Rico, responsables de enviarlo a una cárcel del Negociado Federal de Prisiones, que podría ser en Pensacola, Florida, como solicitó.
Previo a la sentencia, el convicto empresario, representado por la abogada María Domínguez, quien fuera fiscal federal, manifestó ante el juez Arias Marxuach estar arrepentido por sus actos delictivos.
“Estoy aquí con el más profundo remordimiento por las decisiones y actos que me han traído ante esta corte”, afirmó Santamaría.
A la vez, el también abogado lamentó el dolor causado a su familia por los pasados dos años, por lo que “me siento avergonzado” de contribuir a la “pérdida en la confianza de las instituciones públicas”, que permitió enviar a prisión a más de media docena de alcaldes, entre estos Ángel Pérez, presidente de los ejecutivos municipales pertenecientes al oficialista Partido Nuevo Progresista (PNP).
También a Félix Delgado Montalvo, responsable del ayuntamiento de Cataño, frente a la bahía de San Juan, considerado una estrella del anexionista PNP, y que tan pronto se enteró de una pesquisa del Buró Federal de Investigaciones (FBI) contra su esposa, por su estilo de vida rutilante, decidió colaborar al entregar a varios colegas suyos.
Santamaría, quien pasaba dos mil dólares semanales a Delgado Mercado, reconoció que perdió compañías, negocios, oficina legal, amigos y su lugar en la comunidad, y lamentó apartarse de sus seis hijos y esposa.
“He cooperado lo más posible, asistiendo al Ministerio Público con información y documentos, siguiendo sus instrucciones en investigaciones proactivas”, reveló antes de su sentencia.
Subrayó que “ha sido difícil testificar en corte contra personas que eran importantes en mi vida y que consideraba como mis amigos”.
Santamaría se declaró culpable en 2021 por un cargo de conspiración para sobornos y comisiones ilegales, mientras que fue excluido de múltiples esquemas en otros ayuntamientos en los que cooperó posteriormente con las autoridades.
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