Además de esas bajas el ejército ucraniano se quedó sin 14 mil unidades de armas, incluidos más de mil 200 tanques y otros vehículos blindados desde el inicio de 2024, precisó el jefe de la cartera de Defensa, según comunicó la agencia de noticias TASS.
Las tropas rusas obligan a las ucranianas a retirarse hacia el oeste. En el último mes han liberado cuatro localidades en la República Popular de Donetsk (Névelskoye, Orlovka, Tónenkoye y Krásnoye) y una (Mírnoye) en la región de Zaporozhie.
Según Shoigú, desde principios de este año Rusia pasó a controlar un total de 403 kilómetros cuadrados del territorio en la zona de la operación militar especial.
Tras el fracaso de la contraofensiva, Ucrania intenta consolidar sus posiciones en ciertas áreas, pero no ha logrado sus objetivos en ningún frente.
Kiev también pretende convencer a patrocinadores occidentales de su capacidad para enfrentarse a Rusia. Para ello, intenta trasladar hostilidades al territorio ruso, recurriendo a actos de terrorismo y bombardeos contra la población civil.
Mientras tanto, Rusia ha finalizado la construcción de dos polígonos en las Repúblicas Populares de Lugansk y Donetsk, y tiene previsto levantar otros cinco hasta finales de 2024, destacó Shoigú.
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