Las conversaciones, previstas para efectuarse en el edificio del Ministerio de Administración Pública, Trabajo y Seguridad Social (Maptss), buscan encontrar un acuerdo para evitar la segunda fase de la huelga general en la función pública, marcada para efectuarse del 22 al 30 de abril.

En la vuelta a la mesa de diálogo los representantes de las organizaciones obreras declararon a Novo Jornal que no darán marcha atrás en su decisión y que depende del Ejecutivo resolver el problema del salario mínimo nacional.

Los trabajadores reivindicaban un aumento del salario en la función pública del 250 por ciento, mientras que el salario mínimo nacional pedían se fijara en 245 mil kwanzas, lo cual tras las negociaciones en marzo redujeron a 100 mil kwanzas (alrededor de 120 USD).

También piden la disminución de la tasa del Impuesto sobre la Renta del Trabajo, entre otros asuntos.

El Gobierno, por su parte, refiere que resulta económicamente inviable acceder a esas demandas y propuso estudiar variantes como el pago diferenciado por sectores y categorías de empresas (grandes, medianas y pequeñas).

El desacuerdo entre las partes condujo a la realización de la primera etapa del paro nacional en la función pública, del 20 al 22 de marzo, y aunque de forma general transcurrió de forma tranquila, en algunas provincias se produjeron arrestos.

oda/kmg