Tras un año de discusiones en el Congreso, un grupo de nueve congresistas de derecha que votaron para archivar la propuesta, dieron al traste con la posibilidad de que el proyecto superara el tercer debate en la Comisión Séptima y pudiera ser discutido en la plenaria de esa instancia legislativa.

Ahora, en caso de que el Gobierna insista en sacar adelante la iniciativa solo podrá volver a presentarla en la próxima legislatura, que comienza el 20 de julio.

El representante a la Cámara por el Pacto Histórico Gabriel Becerra, por ejemplo, opinó que, al matar el proyecto, una vez más la oposición le da la espalda a las mayorías nacionales, a los más marginados que seguirán padeciendo la falta de garantías de este derecho.

“El congreso no cumple con su papel de ayudar a solucionar uno de los grandes problemas del país. No vamos a renunciar a la reforma a la salud, apoyaremos las medidas del presidente Petro en el marco de sus facultades, y llamamos al pueblo a movilizarse el próximo 9 de abril y 1 de mayo”, expresó.

De su lado, el también representante Agmeth Escaf estimó que con lo sucedido hoy en el Senado ganó la codicia, la avaricia, «el billete por debajo de la mesa para que nada cambie».

«El hundimiento de la reforma a la salud es un acto mezquino en contra del pueblo», afirmó.

También el gobernador de Nariño (suroeste), Luis Alfonso Escobar, mostró su descontento al manifestar que quienes hundieron la iniciativa tendrán bajo su conciencia las muertes que pudieron evitarse con una reforma ampliamente discutida y hundida con artimañas parlamentarias.

Por su parte, la senadora por el Pacto Histórico Catalina Pérez, declaró que durante esta jornada ganaron los que se lucran con la muerte y enfermedad del pueblo colombiano.

Gustavo Bolívar, director del Departamento Administrativo para la Prosperidad Social refirió que con la muerte del proyecto, se hunde la posibilidad de llevar salud de calidad a millones de compatriotas que hoy no tienen servicios de salud.

La reforma al sistema de salud constituía una de las apuestas más grandes del actual gobierno, y proponía crear una red de centros de atención primaria que brinden servicios integrales y a tiempo a la población, con énfasis en las zonas rurales y marginadas, con un enfoque preventivo.

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