La coordinadora de la bancada legislativa, Viviana veloz, indicó este sábado en una rueda de prensa que someterán a juicios políticos a la canciller, Gabriela Sommerfeld; a la ministra de Gobierno y del Interior, Mónica Palencia; y al titular de Defensa, Gian Carlo Loffredo.

Veloz afirmó que hasta el momento fueron, como bancada, una “oposición responsable, comprensiva, respetuosa y crítica y hemos apoyado varios proyectos de ley económicos urgentes”, sin embargo, a partir de ahora se declararon en franca oposición en la Asamblea.

No vamos a ser cómplices de un modelo autoritario y dictatorial, no vamos a respaldar estas acciones, sentenció la legisladora.

Según comentó Veloz, la acción de ayer para detener al exvicepresidente Jorge Glas en la sede diplomática mexicana no se trata de lucha contra la corrupción, sino de votos.

“Su acción demuestra que su campaña por el sí en la consulta popular estaba cayendo, por eso le decimos 11 veces no”, aseveró la asambleísta en relación con la consulta popular y referéndum del 21 de abril en la cual los ecuatorianos deberán responder 11 interrogantes sobre seguridad y empleo.

En la misma rueda de prensa, la presidenta de la RC y excandidata presidencial, Luisa González, exigió al mandatario Daniel Noboa que presente su renuncia al cargo ante la “incapacidad de gobernar”.

Argumentó que el gobernante está incitando a Ecuador a entrar en un conflicto internacional, probablemente hasta armado, por haber violado normas globales y también disposiciones nacionales, como la Constitución y el Código Orgánico Internacional Penal.

En la noche de este viernes, uniformados ecuatorianos entraron con violencia en la embajada mexicana en Quito para detener al exvicepresidente Jorge Glas, a quien más temprano el gobierno de Andrés Manuel López Obrador le había concedido asilo por considerarlo un perseguido político.

Videos que circulan en redes sociales muestran a policías trepando paredes de la embajada, que estuvo desde temprano fuertemente custodiada por militares, y la agresión física a Roberto Canseco, quien quedó como encargado de la misión luego de que la embajadora Raquel Serur fuera declarada persona non grata.

El operativo realizado causó repudio a nivel nacional e internacional por violar el artículo 22 de la Convención de Viena y conllevó a la ruptura de relaciones bilaterales.

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